Para muchas personas el historial de crédito es una preocupación constante. Este informe, emitido por una entidad especializada, en México por ejemplo el Buró de Crédito, refleja y detalla el historial de pagos, y también impagos, de todos los créditos que posee una persona.
Esto significa que si dejas de pagar una mensualidad e tu tarjeta de crédito, un crédito hipotecario o un préstamo bancario, automáticamente la institución financiera que te otorgó el crédito lo reportará al Buró de Crédito y tu reputación financiera se verá dañada.
No hay fórmula mágica para que nuestro historial crediticio, si es malo, se convierta en positivo. Sin embargo, hay ciertas acciones que podemos llevar a cabo para mejorarlo.
¿Cuánto gasto VS Cuánto gano?
El primer paso, aunque usted no lo crea, para comenzar a sanear las finanzas personales y mejorar el historial de crédito es identificar cuánto ganamos y lo que podemos hacer con ese dinero. Es decir, ¿el salario que percibo me alcanza para solventar la vida que llevo? Es importante hacer un balance de ingresos contra egresos, ya que solo así nos daremos cuenta si estamos gastando más de lo que llega a quincena con quincena a nuestras cuentas.
Conoce y reconoce tus deudas
El segundo paso es olvidarnos de esa frase que nos ayuda a evadir la realidad… “Total, solo se vive una vez”. Sí, aunque solo hay una vida, lo ideal es vivirla sin muchos sobresaltos. Por eso, aprende a reconocer tus deudas y planearlas dentro de sus gastos. Esto significa que parte de tus gastos FIJOS serán todos aquellos montos que debas pagar por conceptos de créditos. Recuerda: si lo dejas “para mañana”, eso puede convertirse en una bola de nieve.
Otro consejo que debes seguir, y está probado, es acomodar tus deudas de mayor a menor. Esto, porque entre más grande sea tu deuda, normalmente es mayor el interés que pagas si llegas a atrasarte.
¡Paga a tiempo!
Aunque suene trillado, organiza tu presupuesto, revisa tus fechas de corte y no dejes para mañana lo que puedes hacer hoy. Por eso, paga a tiempo.
Guarda bajo llave tus tarjetas
Hay muchas personas que tramitan nuevos créditos para pagar…¡los vencidos! No te dejes engañar (por ti mismo) y ponte metas para acabar con tus deudas. Tal vez sea momento de amarrarte un poco y dejar pequeños lujos como el café diario o esos cigarros que tanto te gustan. En resumen: guarda tu tarjeta de crédito.
Recuerda: si tienes un mal historial de crédito, cuando quieras tramitar, por ejemplo, un crédito hipotecario, lo más seguro es que te digan que no. Y lo peor no es eso, sino que al liquidar tus deudas, podrías tardar cercar de 6 años para salir de la calificación negativa del Buró de Crédito.